domingo, 22 de junio de 2014

LEYENDA DE LA YERBA mate

Yarí - i vivía cerca de la selva misionera. Era bella y joven, y cuidaba con afecto a su viejo padre, un indio casi ciego que se había negado a seguir el curso de la tribu a la que pertenecían. " La jone Yarí pronto aprendió a pescar, cazar y a recoger los frutos de la apretada selva donde habían quedado. Su padre, agradecido, rogaba a Dios que recompensara a la joven por tantos desvelos. Cierto día, apareció en la casa, un peregrino, que no era otro que el mismo Dios. Yarí - i lo recibió generosamente, cazó y cocinó para él un exquisito agutí y le preparó una confortable cama. Al día siguiente, el peregrino se preparó para partir "No me iré sin recompensarte - dijo -. Haré brotar una nueva planta que llevará tu nombre, y tú serás, desde ahora, la Caa - Yarí inmortal". Diciendo así, el dios hizo nacer la yerba mate, cuyas virtudes refrescantes y terapéuticas son conocidas por todos los que la consumen, y nos da un simbolo de amistad y solidaridad entre nosotos

LEYENDA DEL AMANCAY

Quintral, hijo del cacique, era un apuesto joven al que le gustaba recorrer la orilla del río cazando y pescando. Conoció a Amancay, una hermosa y sencilla muchacha, quien se enamoró de aquél joven apuesto y valiente. Pero esos sentimientos de mutua atracción se transformaron en amor irrealizable, puesto que una muchacha de origen humilde no podía pretender al hijo del cacique. De esta manera fue pasando el tiempo, hasta que un día llegó hasta ellos una epidemia que comenzó a diezmar la tribu, cayendo enfermo el joven indígena. Ante la imposibilidad de lograr su mejoría, y enterada Amancay, consultó a una Machi (curandera), quien le confió el secreto para obtener el remedio. El mismo consistía en una infusión preparada con una flor que crecía en las cumbres heladas.

domingo, 1 de junio de 2014

Leyenda ONA del Sol y la Luna

Hace mucho tiempo , el sol y la luna vivian en la tierra de los Onas.En ese entonces las mujeres dominaban a los varones y eran ellos los que hacian todas las tareas del hogar. En determinadas ocaciones, las mujeres se reunían en un amplio toldo para llevar a cabo una ceremonia secreta . Durante el rito, las participantes se reunían alrededor del fuego y se disfrazaban: se pintaban el cuerpo con arcilla roja y blanca y se cubrían de plumas. Los hombres, mientras tanto, escuchaban los gritos y no se atrevían a acercarse por miedo a contrariar a los espíritus convocados. Pero un día tres hombres decidieron espiarlas. Se fueron acercando con sigilo, mirando atentamente a su alrededor y ocultándose. Al llegar junto al toldo y ver por entre las junturas de los cueros se dieron cuenta de la gran verdad: los temidos espíritus no eran más que sus propias mujeres, a quienes reconocieron una por una. Esto enfuereció a los hombres, y se desató una terrible pelea,donde todos juntos se lanzaron contra las mujeres y las golpearon hasta matarlas. Krren (el sol) enceguesido le dio fuertes golpes en la cara a la luna. Después de la derrota, Krah (la luna), desesperada de dolor y humillación, se sumergió en el mar, nadó hasta el horizonte y desde allí subió al cielo, que sería desde entonces su nueva morada. Estaba furiosa con Krren, con los hombres y con todos los espíritus masculinos, pero también se sentía ufana de ser la única que había salvado la vida. El Sol fue tras ella, burlándose de su cara manchada por los moretones y las quemaduras, pero no pudo ni podrá alcanzarla jamás. La gran persecución se repite todos los meses. Krah asoma poco a poco su rostro dolorido y se muestra por completo, clara y redonda, pero cuando divisa a Krren y comprende que él sigue dispuesto a maltratarla, comienza a esconderse hasta desaparecer.